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domingo, 29 de mayo de 2011

Crónica del Cordobazo

Por Rodolfo Walsh*
Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan Trabajadores metalúrgicos, del transporte y otros gremios declaran paros para los días 15 y 16 de Mayo, en razón de las quitas zonales y el no reconocimiento de la antigüedad por transferencias de empresas.

Los obreros mecánicos realizaban una asamblea y son reprimidos, defienden sus derechos en una verdadera batalla campal en el centro de la ciudad el día 14 de Mayo.

Los atropellos, la opresión, el desconocimiento de un sinnúmero de derechos, la vergüenza de todos los actos de gobierno, los problemas del estudiantado y los centros vecinales se suman.

Se paraliza totalmente la ciudad el 16 de mayo. Nadie trabaja. Todos protestan. El gobierno reprime.

En Corrientes es asesinado el estudiante Juan José Cabral. Se dispone el cierre de la Universidad.

Todas las organizaciones estudiantiles protestan. Se preparan actos y manifestaciones. Se trabaja en común acuerdo con la CGT.

El día 18 es asesinado en Rosario, el estudiante Adolfo Ramón Bello. Se realiza con estudiantes, obreros y sacerdotes tercermundistas una marcha de silencio en homenaje a los caídos.

El 23 de Mayo es ocupado el Barrio Clínicas por los estudiantes y son apoyados por el resto del movimiento estudiantil.

El 26 de Mayo el movimiento obrero de Córdoba resuelve un paro general de las actividades de 37 horas a partir de las 11 horas, para el 29 de Mayo, con abandono de trabajo y concentraciones públicas de protesta.

Los estudiantes adhieren en todo a las resoluciones de la CGT. Los estudiantes organizan y los obreros también. Millares y millares de volantes reclamando la vigencia de los derechos conculcados inundan la ciudad los días previos.

El 29 de Mayo amanece tenso. Los trabajadores de luz y fuerza son atacados con bombas de gases a la altura de Rioja y General Paz. Una vez más la represión está marcha.

Las columnas de los trabajadores de las fábricas automotrices llegan a la ciudad y son atacados. El comercio cierra sus puertas y la gente inunda las calles.

Corre la noticia de la muerte de Máximo Mena, obrero mecánico. Se produce un estallido popular, la rebeldía contra tanta injusticia, contra los asesinatos, contra los atropellos. La policía retrocede. Nadie controla la situación.

Es el pueblo. Son las bases sindicales y estudiantes que luchan enardecidas. El apoyo total de la población.

Es la toma de conciencia contra tantas prohibiciones. Nada de tutelas ni usurpadores del poder, ni de cómplices participacionistas.

El saldo de la batalla de Córdoba, "El Cordobazo", es trágico. Decenas de muertos, cientos de heridos. Pero la dignidad y el coraje de un pueblo florecen y marcan una página histórica argentina y latinoamericana que no se borrará jamás.

En medio de esa lucha por la justicia, la libertad y el imperio de la voluntad del pueblo, sepamos unirnos para construir una sociedad más justa, donde el hombre no sea lobo del hombre, sino su hermano.

"Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan.

La historia aparece así como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de todas las cosas. Esta vez es posible que se quiebre el círculo...".

*Extraído del “Periódico de la CGT de los Argentinos”.
Colección Completa. Números 1 al 55. Mayo 1968 - Febrero 1970.

viernes, 20 de mayo de 2011

Pidieron reclusión perpetua y cárcel común para los asesinos de Walsh


Gentileza Tiempo Argentino

Entre los acusados están los ex marinos Alfredo Astiz, Jorge “Tigre” Acosta, Antonio Pernías y Ricardo Cavallo. Los abogados de la ex diputada Patricia Walsh aseguraron que se trató de “un plan sistemático de exterminio”.

La querella que representa a la ex diputada Patricia Walsh pidió ayer la pena de “reclusión perpetua en cárcel común” para ex marinos del grupo de tareas 3.3.2, que actuaron en la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), por el crimen de su padre, el escritor y periodista Rodolfo Walsh.
Los abogados Miriam Bregman y Luis Bonomi pidieron ante el Tribunal Oral Federal Nº 5 porteño (TOF5) ayer, al concluir su segundo día de alegato, la máxima pena prevista en el Código Penal para 12 de los 19 imputados. Entre ellos se encuentran los ex marinos Alfredo Astiz y Jorge “Tigre” Acosta.
Walsh fue acribillado en la calle, en el barrio porteño de San Cristóbal, el 25 de marzo de 1977 –día desde el que permanece desaparecido– por una patrulla de integrantes del Grupo de Tareas 3.3.2 y su cuerpo fue llevado a la ESMA, donde fue reconocido por algunos sobrevivientes que declararon en el juicio oral.
La misma pena fue solicitada para Pablo García Velazco, Jorge Radice, Juan Carlos Rolón, Antonio Pernías, Julio César Coronel, Ernesto Weber, Ricardo Cavallo, Juan Carlos Fotea, Juan Antonio Azic, Adolfo Miguel Donda y Raúl Scheller. Según la reconstrucción del crimen hecha en las audiencias, el periodista y escritor fue interceptado por la patota de la ESMA en la esquina de San Juan y Entre Ríos, y cuando intentó defenderse con una pistola calibre 22 que portaba, fue baleado por Weber y su cuerpo llevado al centro de detención clandestino.
Se trata de la tercera querella en pedir las penas más severas para los represores de la ESMA y reclamar que estos crímenes de lesa humanidad sean tenidos como parte de un “genocidio”.
“No fueron delitos aislados sino aberrantes crímenes dirigidos contra un grupo nacional que la dictadura consideró su enemigo y que quería un mundo sin explotadores ni explotados”, argumentó Bonomi. En esa línea, Bregman había señalado el miércoles, en el comienzo del alegato, que la Armada actuó “en un plan sistemático de exterminio; un genocidio contra una generación militante a la que era necesario aniquilar para imponer un proyecto económico, político y social que tenía como objetivo cambiar regresivamente la estructura del país”.
Para el caso de Walsh pidió que se lo considere “homicidio doblemente agravado por la alevosía y el número de autores”, además de por su privación ilegítima de la libertad y las torturas infligidas.
Para la semana próxima el TOF5 prevé conceder la palabra al abogado Rodolfo Yanzón, representante de otro grupo de querellantes, y luego será el turno del fiscal Pablo Ouviña, tras lo cual corresponderá que lo hagan los defensores de los imputados. El secuestro de Walsh ocurrió un día después de que el escritor diera a conocer la Carta Abierta de un Escritor a la Junta Militar, al cumplirse un año del golpe militar, en la que denunciaba los crímenes que estaba cometiendo la dictadura.
La ESMA fue el centro clandestino de detención más grande de la dictadura, por el que pasaron casi 5000 personas que eran alojadas en el Casino de Oficiales del predio ubicado en el barrio de Núñez. En el “megajuicio” se investigan 85 casos de crímenes de lesa humanidad, entre los que se encuentran los secuestros y homicidios de las monjas francesas Alice Domon y Léonie Duquet y de la fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Azucena Villaflor, por los que están acusados 18 represores. El ex diputado nacional Luis Zamora también pidió la semana pasada reclusión perpetua para 12 de ellos por los crímenes contra los integrantes del Grupo de la Iglesia de la Santa Cruz, ubicada en el barrio de San Cristóbal, en el que se reunían para pedir por la aparición de familiares. <